EL AVANCE DEL CAMPO SOCIALISTA


“En 1945 las fronteras de la región que se escindía del mundo capitalista se ampliaron considerablemente. En Europa incluyeron toda la zona comprendida al este de una línea que iba, aproximadamente, del río Elba, en Alemania, hasta el Adriático, incluyendo toda la península balcánica, menos Grecia y la pequeña parte que Turquía conservaba en Europa. Polonia, Checoslovaquia, Hungría, Yugoslavia, Rumania, Bulgaria y Albania pasaron a la zona socialista, así como la parte de Alemania ocupada por el Ejército Rojo después de la guerra y convertida en la República Democrática Alemana en 1954. La mayoría de las zonas que Rusia perdió como consecuencia de la guerra y la revolución después de 1917, y un par de territorios que antes habían pertenecido al Imperio austro- húngaro, los recuperó también o los adquirió la Unión Soviética entre 1939 y 1945. Mientras tanto, se produjo una enorme ampliación de la futura zona socialista en el Extremo Oriente con la llegada al poder de regímenes comunistas en China (1949) y en parte de Corea (1945), y de lo que había sido la Indochina francesa (Vietnam, Laos, Camboya) después de una guerra de treinta años (1945-1975). La zona comunista se amplió todavía un par de veces algo más tarde, en ambas ocasiones en el hemisferio occidental-Cuba (1959) y algunos países africanos en los años setenta-, pero, en lo esencial, el área socialista había quedado configurada en 1950. Gracias a la enorme población de China, incluía aproximadamente a la tercera parte de la población mundial, aunque el tamaño medio de los países socialistas, con la excepción de China, la URSS y Vietnam (58 millones de habitantes) no era muy grande: su población iba de los 1,8 millones de habitantes de Mongolia a los 36 millones de Polonia.

Ésta era la parte del mundo cuyos sistemas sociales, a partir de un momento determinado de los años sesenta, pasaron a conocerse, en la terminología ideológica soviética, como países del “socialismo real” un término ambiguo que implicaba o sugería que podía haber otras clases distintas y mejores de socialismo, pero que en la práctica ésta era la única que funcionaba.”

E. Hobsbawm, Historia del siglo XX.

Entradas populares